Quedan pocos días para que entre en vigor la nueva versión del Certificado SAE (Sistema de Autocontrol Específico); concretamente, será el próximo 1 de febrero cuando la versión 4 de este protocolo sustituya a la anterior, del 2020.
Las adaptaciones, necesarias para el propio protocolo y demandadas por los países que exigen este documento, han acabado materializándose en la incorporación de nuevos requisitos, que te contaremos en detalle, para que puedas obtener tu certificación o, si ya la tienes, gestiones los cambios y evites interrupciones.
Y es que, en un mercado global como el actual, contar con esta certificación es básico para quien busca incrementar su negocio y competitividad, alcanzando nuevos mercados fuera de las fronteras europeas.
Por eso, el SAE acredita el cumplimiento de elementos como la calidad, seguridad, trazabilidad y el resto de requisitos solicitados por los países importadores.
¿Qué es el SAE?
Este documento es obligatorio, tal y como lo establece el Real Decreto 993/2014, para todas las empresas que quieran exportar alimentos de origen animal o alimentos que incluyan productos de origen animal, a terceros países; es decir, a lugares cuya legislación incluya requisitos diferentes a los que se aplican dentro de la Unión Europea.
Este certificado de exportación, que tiene una validez de tres años aunque deben cumplirse auditorías anuales para su mantenimiento, es emitido por un Organismo Independiente de Control (OIC) autorizado por la Dirección General de Sanidad de la Producción Agraria (DGSPA).
Cambios significativos en la versión 4
Como ya hemos aclarado, este certificado es un requisito legal—obligatorio— para acceder a terceros mercados, a diferencia de otras certificaciones voluntarias orientadas también a incrementar el nivel de seguridad alimentaria como la ISO, IFS o BRC.
El SAE está basado en la trazabilidad y en las fichas de especificaciones, o lo que es lo mismo fichas de producto específicas para exportación. En estas es necesario incluir todos los requisitos de origen (trazabilidad), salud pública, sanidad animal y SP-Autocontrol, en función del Nivel SAE que aplique al ASE (certificado de exportación específica).
En base a estos requisitos, te presentamos los principales cambios que trae la versión 4 de SAE:
- Traslado de algunos de los requisitos que formaban parte de la categoría “Salud Pública” a la categoría de reciente creación “SP-Autocontrol”. Estos requerimientos deben deben ser auditados por las entidades de certificación incluirse en las fichas de especificaciones y justificar su cumplimiento de acuerdo con el anexo 4.
- Las entidades de certificación empiezan a controlar las sustituciones de certificados de exportación solicitadas por los exportadores, lo que puede generar no conformidades durante las auditorías.
- Se abre la posibilidad de hacer determinadas actividades de auditoría, en modo remoto, a decisión de la entidad de certificación
- Se revisan los tiempos mínimos de auditoría, ampliándose las jornadas de auditoría a un mínimo de una jornada y media.
- Se flexibiliza la valoración general de No Conformidades e incluyen criterios más estrictos, al respecto de la antigua nota interpretativa nº 1 como anexo 9, con los que es más probable detectar durante las auditorías no conformidades muy graves, lo que conlleva la retirada del certificado.
- Se revisan los criterios de autoprecintado de grupajes.
- Se incorpora el término “Suspensión Temporal de Certificación”.
Ventajas de implantar el Certificado SAE
En Redimensiona podemos ayudarte con la implantación del sistema SAE, permitiéndote demostrar el cumplimiento de los requisitos exigidos por el país importador, para que puedas obtener la certificación y con ella acceder a beneficios como:
- Acceso a nuevos mercados.
- Mejora de procesos de control sanitario y trazabilidad empresarial.
- Mejor posicionamiento respecto a competidores y refuerzo de la imagen de marca ante los clientes.
No pierdas esta oportunidad de empezar a exportar fuera de la Unión Europea con la llegada de la versión 4 de la SAE. ¡Contáctanos!
