A veces, todo lo que hace falta para lograr un gran éxito es una nueva perspectiva. El servicio de consultoría estratégica aporta esa perspectiva independiente y experta, la propuesta de cambio capaz de impulsar el crecimiento de la empresa y consolidar su posición en el mercado.
“¿Qué sería de la vida, si no tuviéramos el valor de intentar algo nuevo?”
Vincent Van Gogh
¿Qué es un consultor estratégico?
El consultor estratégico presta un servicio profesional experto que consiste en asesorar a las organizaciones sobre decisiones vitales. Estas decisiones pueden estar relacionadas con cualquiera de las áreas del negocio: operaciones, gestión de personal, estrategia digital, marketing…
La consultoría estratégica es capaz de aportar resultados de crecimiento y de mejora del negocio. El servicio es prestado por un profesional con un profundo conocimiento del sector y una visión del mercado más amplia.
Pero… los decisores de cualquier empresa también son, por lo general, excelentes conocedores de su segmento de mercado, ¿no? Entonces, ¿qué ventajas ofrece el servicio de consultoría estratégica? Fundamentalmente tres:
- El punto de vista del consultor estratégico es independiente.
- El ejecutivo es especialista en su actividad. El consultor es especialista en optimización de procesos, métodos de trabajo, legislación, estrategias comerciales y otras disciplinas específicas para aportar a la organización factores de crecimiento y mejora.
- El consultor dedicará todo su tiempo a estudiar a fondo el negocio de su cliente, a buscar la mejor solución al asunto que se le plantea y la forma más efectiva de implementarla. El ejecutivo, lógicamente, estará dedicando su tiempo y su atención a la gestión de la empresa.
La clave está en la estrategia
Para comprender mejor los beneficios que la consultoría estratégica puede aportar a una empresa, podemos empezar por definir qué significa estrategia.
Según nuestro diccionario, la estrategia es una “serie de acciones muy meditadas, encaminadas hacia un fin determinado”.
En el mundo empresarial, ese fin puede ser mejorar en algún sentido o resolver un problema. Un servicio de consultoría puede aportar valor a las empresas que necesitan:
- Mejorar su eficiencia: reducir costes o aumentar el margen.
- Ampliar su cuota de mercado o alcanzar nuevos mercados,
- Conseguir nuevos proveedores,
- Implementar un nuevo modelo de negocio,
- Obtener una certificación o superar una auditoría,
- Mejorar la calidad de su producto o servicio, etc.
El procedimiento empieza con el análisis de la situación inicial de la organización y de su posición y relaciones con el mercado.
A partir de este análisis será posible establecer la estrategia, la “serie de acciones meditadas” que llevarán a la empresa a conseguir estos objetivos.
Por último se lleva a cabo, la implementación de los planes estratégicos definidos y la creación de hojas de ruta en las que se describen los pasos a dar para implementar los planes y los recursos necesarios para conseguirlo.
¿Cómo elegir un buen consultor estratégico?
Existen muchas empresas que prestan servicio de consultoría estratégica, y resulta difícil calibrar de antemano la capacidad de aportar valor que cada una tiene.
Lógicamente, el decisor que contrata este servicio necesita sopesar cuidadosamente su decisión para invertir bien su dinero. ¿Qué criterios hay que tener en cuenta?
A continuación te facilitamos un checklist que te ayudará a saber cuál es la información básica que debes recabar y a tomar una decisión acertada:
1. Incluye solamente especialistas en tu sector
Para prestar un buen servicio de consultoría es necesario conocer a fondo la industria y su funcionamiento, así como los principales agentes que operan en el sector.
Una investigación de su página web debe ser suficiente para hacer la primera criba. Si muestran abiertamente los logos de los clientes con los que han trabajado o algunos casos de éxito, puedes mantener a ese consultor en tu lista.
2. Elige siempre un servicio personalizado
Muchas empresas de consultoría aseguran que su servicio es personalizado, pero, ¿cómo saber de antemano si responderán a las expectativas que crean? Es fácil si observas su actitud durante la entrevista. ¿Hablan de su método de trabajo o te hacen preguntas sobre el funcionamiento de tu organización? ¿Sientes que tienes tiempo y espacio para explicar tus necesidades? ¿Te explican claramente lo que se va a hacer y cómo?
La respuesta a estas preguntas te aclarará si estás ante el consultor estratégico ideal o debes tacharlo de tu lista.
3. Pide referencias:
Este último punto es definitivo, aunque muchas veces se pasa por alto. ¿Te parece violento exigir muestras de profesionalidad y buen hacer? ¡Nada más lejos de la realidad! Has de saber que es una práctica habitual. Si te asaltan las dudas, recuerda que lo que está en juego es tu proyecto, ¡nada menos!
Tu consultor estratégico ideal tendrá experiencia demostrable en tu sector y estará encantado de aportar referencias. Pregúntale abiertamente y observa su reacción. ¿Contesta con evasivas? ¡Huye! Si ves que no duda en ofrecer referencias de algún caso de éxito, es posible que estés ante el consultor estratégico ideal.
El análisis y consejo especializados que te aporta el servicio de consultoría estratégica te aportará la ventaja competitiva que necesitas para reforzar la posición de tu empresa en el mercado y crecer de forma sostenible.
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