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¿Qué es la reingeniería de procesos? Un paso más para la mejora continua

La reingeniería de procesos hace posible revisar a fondo los procesos de la empresa para lograr una transformación que les permita mejorar, adaptarse a los cambios del mercado, competir y crecer.

‘La mejor estructura no garantizará los resultados ni el rendimiento. Pero la estructura equivocada es una garantía de fracaso.’ Peter Druker

¿Qué significa reingeniería?

Reingeniería significa reestructuración, y se aplica a los procesos empresariales. Se refiere a su análisis y replanteamiento para lograr una optimización que los haga mucho más eficaces. Por eso lo habitual es hablar de reingeniería de procesos. Puede referirse a la reestructuración total de una empresa o solo de algunas de sus operaciones.

 La reingeniería de procesos también se conoce como BPR por sus siglas en inglés, Business Process Reingeenering.  Este concepto fue descrito a mediados de los años noventa, y se le atribuye su creación al profesor Michael Hammer, aunque para su difusión, tuvo gran importancia también el consultor y empresario James Champy, coautor junto con Hammer del libro ‘Reingeniería’.

 Hammer y Champy aseguraban que no tenía sentido conformarse con el 10 o el 15% de aumento de la calidad, la rapidez o el servicio, sino que la mejor estrategia pasa por repensar y reinventar los procesos drásticamente para lograr mejoras igualmente drásticas.

Las tres Cs

La aplicación del proceso de reingeniería se centra en lo que se conoce como las tres Cs: cliente, cambio y competencia.

  • Cliente: es el primer factor, y no por casualidad. La mejora se alcanza desde el punto de vista del cliente y sus necesidades.
  • Cambio: se trata de reinventar los procesos, analizando la forma de realizar el trabajo para encontrar una forma mejor, ya sea mediante la aplicación de nuevas tecnologías o cualquier otra solución que permita alcanzar mayor efectividad.
  • Competitividad: sobrevivir en el mercado implica ser consciente del constante aumento de la competencia y buscar la mejora continua.

Ejemplos de reingeniería en empresas: ¿cómo se lleva a la práctica?

A continuación enumeramos algunos de los principios básicos para aplicar BPR, así como un ejemplo real de reingeniería de procesos para ilustrar la teoría.

 Menos es más: optimizar los procesos empieza por simplificarlos todo lo posible.

  • Es imprescindible el apoyo y la implicación de la directiva para promover el cambio.
  • El punto de partida es el análisis de la operativa, la definición de las metas y de las métricas para analizar el resultado de los cambios.
  • La estrategia tiene que enfocarse siempre hacia los resultados, pero sin perder de vista la misión de la compañía.
  • El enfoque tiene que buscar el beneficio del cliente en todo momento, buscar la forma de aportarle más valor.
  • La reingeniería de procesos funciona mejor en equipos empoderados. Cualquier persona puede tener una idea brillante que haga posible ahorrar mucho dinero a la empresa.
  • Hay que dejar atrás los procesos que no funcionan, desterrando el argumento ‘esto siempre se ha hecho así’. La reingeniería tiene mucho de reinvención, de renovación.
  • La retroalimentación y la comunicación son esenciales para el éxito de la estrategia.

 Muchos de estos puntos también forman parte de la metodología Lean: la importancia del apoyo directivo, de considerar a todos los miembros del equipo como agentes de cambio, de enfocarse en el cliente y buscar la mejora continua… Y de hecho, es posible aplicar la reingeniería de procesos con principios Lean Six Sigma.

Un caso de estudio:

Imagina una empresa del sector de la alimentación, por ejemplo, de fabricación de harinas. Quieren implementar mejoras en su línea de producción y empezar a beneficiarse de las ventajas de la tecnología para optimizar la actividad y optan por contratar un servicio de consultoría estratégica

 Los consultores analizan la actividad y utilizan el enfoque de la reingeniería de procesos.

 El estudio preliminar revela que, efectivamente, nuestra empresa puede beneficiarse de aplicar tecnología en sus líneas de producción, y que los ahorros que van a resultar de automatizar algunos procesos compensarán rápidamente las inversiones.

 Sin embargo,  el estudio también evidencia que los costes logísticos son demasiado elevados. Trasladar la producción de la harina desde la fábrica hasta los centros de distribución supone ni más ni menos que el 20% de los costes productivos.

 Quizá lo primero que se puede pensar para reducir este porcentaje es sondear el mercado en busca de otros proveedores, plantearse la opción de operar ellos mismos la logística o bien de otras opciones de transporte que permitan abaratar este coste.

 Cuando se aplica la ingeniería de procesos, no se da nada por sentado. Cada proceso se cuestiona, por lo que se alcanzan soluciones novedosas… y rentables.

 En este ejemplo extraído de un caso real, los consultores descubrieron que resultaría mucho más económico trasladar las fábricas a un punto más cercano a los grandes centros logísticos. De esta forma, los costes operativos se reducían al 9%, haciendo posible la recuperación de la inversión incluso en el caso de un cambio tan drástico como este.   

¿Crees que tu empresa se beneficiaría de aplicar reingeniería de procesos? ¡Seguro que sí! Si necesitas mejorar tus resultados o te estás planteando hacer cambios, consúltanos: irás sobre seguro.

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